Este fin de semana pude asistir a un partido amistoso de cricket, observé como se jugaba, escuche las explicaciones y sentí de primera mano cuánto pesa la bola y lo dificil que es golpearla.
Haciendo un pequeñisimo resumen, cada equipo consta de once jugadores.
Cada equipo, al completo, sólo juega una parte en la que defienden el campo y tratan de expulsar a los contrarios uno a uno. Mientras tanto el equipo contrario sólo tiene a dos jugadores en el campo, los cuales por turnos tendrán 6 intentos de batear la bola. Su misión es defender los tres palos de madera.
El propósito del juego es sumar cuantas más carreras posibles mejor. Para hacer una carrera, una vez bateada la bola, los dos jugadores en el centro de campo corren hacia los extremos en los que se ubica cada jugador, mientras que el equipo contrario tiene que coger la bola y devolverla al centro del campo.
Si al batear la bola uno de los contrarios recoge la bola sin haber tocado el suelo, el jugador contrario ha terminado su tiempo de bateo. Cuando sale, otro jugador lo reemplaza, y así hasta once que son.
Con lo cual, no me extraña que se lleven días y días jugando.
Espero haber explicado de una manera leve en qué consiste el juego, ya que yo aún estoy por terminar de entenderlo.
El sitio en cuestión era el Club de cricket de Cheshunt y debo decir que se respiraba un ambiente muy bonito.
Una vez terminó el encuentro, ambos equipos, formado basicamente por amigos, jugaron a la carrera del barco (se trata de dividirse en dos equipos, cada componente debe beberse media pinta de cerveza, ir corriendo hasta los palos de madera clavados en el cesped y con la cabeza apoyada en el palo dar 3, 4 o 5 vueltas segun se estipule y volver corriendo al puesto de salida para que el siguiente repita la operación).
Yo lo hice, pero sólo para que os lo pudiera explicar mejor, jejeje.
Lo único que puedo deciros es que una vez dadas las vueltas cuando intentas volver el campo se mueve como si en una barca vikinga estuvieras. No obstante, fue divertido.
Como último detalle, deciros que al peor jugador de la jornada se le regala un pene de madera, con lo cual os podeis imaginar el cachondeo.
Y todo ello acompañado de un perfecto día de sol.
U. xx
me ha gustado mucho este post
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